“El primero aspecto a tener bajo control constante es el clima en el interior de la instalación. Entonces son necesarios sensores de alta calidad que siempre supervisen la temperatura, la humedad, la CE y la luz”. De hecho, en este tipo de cultivo, si solo uno de estos parámetros no se cumple, se puede correr el riesgo de perder toda la produción. “Además, la presencia de sistemas capaces de comunicar al istante si hay anomalías permite de intervenir de manera oportuna y limitar los daños”.

“Otro aspecto clave es el
control de riego. El ciclo vital del cannabis es bastante corto y la fertirrigación se hace muy importante”. En comparación con otros tipos de hortalizas cultivadas en invernadero, la de cannabis procede más rapidamente y necesita más atención y sensibilidad con respecto a el suministro de agua y nutrientes.
Spagnol ha dado a la empresa estadounidense una unidad de dosificación
BravoMix con capacidad de administrar la mezla correcta de agua de riego y soluciones madre que la planta necesita en ese preciso momento. Su capacidad de trabajar con extrema precisión, manteniendo un flujo de administratión lento y constante y cambiando el alcance cuando sea necesario, ha demostrado ser una gran ventaja para la producción. Esa unidad ha sido asociada al sistema informatizado de última generación
Process y ha sido conectado a los sensores por la gestión del riego
Gravimatic, dispuestos en las distintas zonas de cultivo de la instalación.
Spagnol ha adoptado un enfoque activo hacia el cliente basado en la comparación y la colaboración para encontrar la mejor solución a sus necesidades. Para satisfacerlas ha propuesto una solución inteligente y de alta calidad capaz de garantizar la gestión de todos los procesos fundamentales con el máximo
cuidado,
precisión y
profesionalidad desde un único lugar.


